Chicago sigue con vida en la lucha por asegurar una posición favorable rumbo al Torneo Play-In, y gran parte del mérito esta vez recae en Josh Giddey. El joven base no solo guio a los Bulls con una actuación sobresaliente, sino que también escribió su nombre en la historia reciente de la franquicia con su séptimo triple-doble de la temporada. Con su victoria 119-111 sobre Miami, los Bulls tomaron una pequeña pero valiosa ventaja sobre el Heat, y ahora dependen de sí mismos para sellar su lugar en casa de cara al mini torneo previo a los playoffs de la NBA.
Un Triple-Doble Para Recordar
La noche de Giddey fue completa desde cualquier ángulo. Terminó con 28 puntos, 16 rebotes y 11 asistencias, cargando al equipo en varios tramos del partido. Esta actuación no solo fue vital para el marcador final, sino que lo colocó entre un grupo selecto de jugadores esta temporada: ya supera los 1,000 puntos, 500 rebotes y 500 asistencias. Solo LeBron James y Nikola Jokic han logrado eso en esta campaña.
Además, sus siete triples-dobles son la segunda mayor cantidad en una sola temporada en la historia de los Bulls, solo por detrás de los 15 que logró Michael Jordan en 1989. El impacto de Giddey fue aún más evidente cuando el partido se apretó en los minutos finales, y su control del ritmo de juego mantuvo a los Bulls siempre al frente.
La conexión entre Giddey y sus compañeros también fue clave. Kevin Huerter aportó 22 puntos y fue pieza importante en el cierre, mientras que Nikola Vucevic contribuyó con 20 tantos y 11 rebotes. Coby White sumó 18, y el novato Matas Buzelis añadió 17 con un triple decisivo en el cierre del juego.
Un Cierre Dramático, Pero Con Sangre Fría
Aunque los Bulls tuvieron el control durante gran parte del partido, el final no estuvo exento de tensión. Faltando menos de un minuto, Chicago solo tenía una ventaja de cinco puntos. En ese momento, Tyler Herro robó el balón y se perfilaba para una jugada fácil, pero en lugar de asegurar la bandeja, apostó por un triple desde larga distancia que terminó fallando.
El rebote cayó en manos de Huerter, quien rápidamente habilitó a Buzelis para un triple que sentenció el encuentro. Esa jugada resumió bien el partido: los Bulls fueron más efectivos en los momentos importantes, y supieron capitalizar los errores del rival.
Después del encuentro, tanto jugadores como cuerpo técnico reconocieron la importancia del triunfo, aunque también insistieron en mantener los pies en la tierra. Giddey fue claro: aún quedan dos partidos y no hay espacio para distracciones.
Ventaja Clave en El Play-In
Esta victoria no solo mejora el récord de los Bulls a 37-43, sino que también les da ventaja directa sobre Miami, ya que ganaron los tres enfrentamientos entre ambos en la temporada. Esa situación les permite asegurarse el noveno lugar si ganan al menos uno de sus últimos dos juegos, contra Washington o Philadelphia.
Jugar como locales en el play-in es una ventaja importante. Enfrentarse al Heat en casa puede marcar la diferencia, especialmente considerando que Miami ha sabido aprovechar su cancha en ediciones pasadas del play-in. El coach Billy Donovan no minimizó el valor de jugar en Chicago, pero también fue claro: la localía solo cuenta si el equipo rinde al nivel necesario.
Los Bulls incluso podrían aspirar al octavo lugar, ocupando ahora medio juego por detrás de Atlanta. Pero esa posibilidad es más complicada, ya que los Hawks tienen el desempate a su favor y Chicago necesitaría ayuda externa para subir un escalón más en la tabla.
Ya armaste tu Parlay con estos partidazos de
cuartos de final en #LaChampions? 🤩⚽️¿Quienes pasarán a Semifinales?🧐
Escoge tu favorito, pronostica, gana y disfruta de
nuestros pagos rápidos 💸¡Juega ahora!📱➡️https://t.co/HCS0draMpV#Barcelona, #Borussia, #PSV o #Villa pic.twitter.com/qPlm13tVCE
— Betcris (@Betcris) April 9, 2025
Miami No Se Rinde, Pero Chicago Está Encendido
El Heat llegó con un buen impulso, después de haber ganado 7 de sus últimos 10 partidos. Tyler Herro lideró con 30 puntos, Bam Adebayo sumó 18 y Davion Mitchell anotó 17, pero no fue suficiente. El equipo de Florida echó de menos a un Andrew Wiggins que apenas ha podido tener continuidad tras su llegada desde Golden State.
Miami aún tiene margen para cerrar bien su temporada, pero esta derrota complica sus opciones de ser locales en el play-in. Ahora deberán buscar una reacción en su próximo partido frente a Nueva Orleans, mientras que los Bulls recibirán a los Wizards en su último juego como locales.
Chicago ha ganado ocho de sus últimos once encuentros y llega en buena forma a esta recta final. Si mantiene este nivel, no solo será un rival peligroso en el play-in, sino también un equipo con potencial de dar pelea en una serie de playoffs. Giddey, con su rendimiento y liderazgo, parece listo para asumir ese reto.